La Taska Sidrería - Cánovas - Valencia, Valencia

josechu de la Viña

Espectacular, las croquetas de compango que se me olvidó fotografiarlas, impresionantes, los puerros, la fabada, el cachopo de foie y cebolla caramelizada, de momento el mejor que he probado. La atención de 10 Enrique un profesional sabiendo atender y ofrecerte lo mejor. El ambiente muy acogedor y moderno a la vez. Totalmente recomendable, es más, pasado mañana vuelvo con mi mujer.

Adrián Cicero Rodríguez

Fuimos al restaurante después de ver un video en RRSS en el que parecía tener buena pinta. Como Asturiano que vive en Valencia esperaba encontrar un restaurante en el que sentirme como en casa.
La experiencia en gran medida no fue buena.
Esperaba poder tomar una sidra, pero al precio de 7€ / botella, preferí optar por otra bebida. Entiendo que deba haber un sobrecoste, pero superar el 250% del precio de venta del mismo producto (en restaurante) en otra región me pareció muy caro.
Para empezar pedimos una ración de queso cabrales y pastel de cabracho y pedimos pan para acompañar al queso. El queso nos generó muy buena sensación, estaba fuerte y muy bueno, pero se torció cuando llegó el pastel de cabracho. El pastel no tenía ni el sabor ni la textura esperada, en lugar de estar acompañado por mayonesa o salsa rosa iba acompañado de una salsa cítrica que en mi opinión no le hacía ningún favor al plato y además no se acompañaba de los clásicos panecillos tostados para ser untado. Me pregunto como se espera en cocina que se coma ese plato, ya que en mi tierra debe ser untado y si no hubiéramos pedido el pan no sé si la opción era comerlo a... ¿cucharadas?
Pedimos cachopo de cecina de León y queso Afuega'l pitu y absoluta decepción.
Precio muy elevado para el producto y su tamaño. La zona central donde encontrabas el relleno estaba buena, pero a medida que se iba a los extremos empezaban a escasear los rellenos demasiado pronto. Eso fue problemático porque la carne en sí misma tampoco estaba demasiado sabrosa y además estaba sosa. Nos comimos el cachopo y no puedo decir que estuviera malo, pero desde luego es el peor que hemos comido.
Pedimos tarta de queso como postre y, aunque que no fuera la mejor, estaba buena. Seguramente volvería a pedirla.
Con respecto al servicio se equivocaron con nuestros platos en dos ocasiones y lo sirvieron a la mesa de al lado. Lo recogieron y lo trajeron de nuevo a la nuestra cuando los comensales de al lado ya habían comenzado a comer la guarnición. Entiendo que no se deba tirar, pero que, al menos parezca que lo han cambiado.
El sitio es muy bonito y la decoración es muy agradable.
Entiendo que no es un restaurante para asturianos, pero si esperan parecerse más a mi comida local, espero que el comentario sirva de ayuda para mejorar.

ANA HERNANDEZ

El ambiente dentro es muy bonito, Mía y otro compañero nos han atendido muy bien, Matías también ha sido muy agradable, no le pongo las 5 estrellas por la proporción de los platos al precio, pero estaba todo espectacular, no hay nada que hayamos probado que no nos haya gustado, sin duda repetiremos conforme se pueda

Isabel Quilez Bernabeu

La comida increíble y el restaurante mejor aún? Nos atendió Darío y fue muy amable y nos recomendó muchísimas cosas riquísimas que probar. Volveremos a probar el postre próximamente

Saray Andrés

Tenia la mesa a las 15:30 pero fuimos una hora antes por si podían hacernos el favor de comer antes, y sin problemas. El local es hermoso, la sidra buenísima, los chorizos y las croquetas de jamón espectaculares. Los mejillones de los mejores que he comido y el cachopo, buenisisisismo. Pero como enamorada de las tartas de queso, eso fue lo que me enamoro!

Beatrice Adriana Turcu

Todo lo que pedimos nos encantó, desde los entrantes hasta los postres. Conforme traían platos estaban mejores que los anteriores. Todo recién hecho y se notaba que era casero.
Volveremos 100% y con más gente para que lo prueben.

Isabel Rescalvo

Habíamos ido al local con anterioridad cuando estaba sin reformar. Ahora es más bonito. Estaba lleno de gente y había mucho ruido, aunque de eso no tienen la culpa los dueños, claro está. La vez anterior ya me pareció algo caro para lo que se ofrece, pero esta vez reservó un amigo y no quisimos decirle que no y por eso volvimos. No es que se coma mal, pero los precios son un poco elevados. Nos costó 146 euros cuatro personas y sin pedir postres. La sidra es algo cara, aunque está bien lo de poder escanciar la sidra con el aparatito. El cachopo ganador del 2024 estaba bueno y el otro, pasable. Yo me pedí merluza y no es que no fuera de calidad, que lo era, pero estaba sosísima, no tenía nada de sal, y la salsita que llevaba por encima, tampoco es que tuviera un sabor intenso, me resultó bastante insípido. Pedimos también anchoas, que estaban muy buenas, pero la ración sólo llevaba tres y éramos cuatro, por lo que tuvimos que pedir dos raciones, y la verdad, tres anchoas, 10 euros, al pedir dos, 20 euros. También pedimos mejillones, y también dejaban que desear, eran muy pequeños y tampoco había gran cantidad. Y es lo que pedimos, más la bebida y nos costó los 146 euros. Tampoco es que no lo recomendaría, pero no es uno de los sitios que repetiría. El trato del personal fue bueno, muy amables todos.

Verónica Peiró

¡Festín de cachopos!

Si deseas trasladar tu paladar al norte de la península y degustar auténtica comida asturiana sin salir de la terreta, la Taska sidrería es tu lugar indicado.

No es la primera vez que lo visitamos y en ninguna ocasión nos ha decepcionado, al contrario, nos hemos encontrado con un local totalmente reformado en el que destaca su gran manzano del que cuelgan pequeñas lámparas que iluminan el resturante y le dan un ambiente más acogedor.

En cuanto a la comida y haciendo hincapié en su plato estrella, se recomienda, "si todo funciona con normalidad", compartir un cachopo para dos personas. Pero como nosotros estábamos indecisos y un poco hambrientos decidimos comernos un cachopo cada uno. ¡Qué locura y que festival de comida!

El de jamón y queso gamoneu ya habíamos tenido la oportunidad de problarlo y es espectacular. Pero esta vez no sabíamos si decantarnos por el cachopo de coppa ibérica y queso idiazabal (tercer mejor cachopo del mundo) o por el de chosco de tineo y compota de queso y pera. Así que desafiamos a Enrique, el camarero, y pedimos los dos. Éste sorprendido por nuestra decisión, no podía creerlo y nos advirtió que con uno sería suficiente. Aun así, decidimos aceptar el reto y no dejamos sobre el plato ni un solo gramo de cachopo. Ver para creer, Enrique no habría dado nada por nosotros y se quedó boquiabierto al comprobar que no sobró absolutamente nada jajaja. Pero lo mejor de todo es que a día de hoy no sabríamos por cual decantarnos, porque el de coppa tiene un sabor excepcional, pero el de chosco destaca por ese toque dulce y para nada se queda atrás.

Sin duda volveremos a seguir degustando el resto de la carta, porque salimos rodando pero de felicidad.